El mejor pueblo del mundo - Informatepy.com

Hitler también lo vio, por eso quiso eliminarlo, era el verdadero escollo en el intento de imponer una raza supuestamente superior que gobierne el mundo, que sin duda lo es, creo yo, el pueblo alemán, en todo lo que tenga que ver con la capacidad de trabajo. Sin ellos el mundo sería más gris, menos glamoroso y la comida más sabrosa. Además de la belleza de sus mujeres y hermosos automóviles que fabrican como son los Maserati, Ferrari y Lamborghini, en mi opinión es el pueblo más lindo del mundo. Obvio microbio, nosotros estamos entre los peores por nuestra corrupción, cretinismo, cobardía e ignorancia, aunque tenemos el mejor cannabis del mundo y las mujeres más bellas y calientes de moral bastante alegre. El más nacionalista, los rusos, con su nuevo zar quien defendió hasta sus putas, dijo que son las mejores del mundo, eso es ser patriota y no macana carajo, es un detalle muy particular. Península que se desprende de la gigantesca China cuya cultura es la predominante en todo Asia y aún la mitad de aquella protagonizó un milagro económico si se quiere al cambiarse la piel sintoísta milenaria por la del cristianismo evangélico, a tal punto, que la iglesia protestante más grande del mundo sigue estando en la capital Seúl. Pero las consecuencias están a la vista y no se trata de un análisis meramente económico, este aspecto es una de las aristas que demuestran el fenómeno, como la elección de Jair Bolsonaro es consecuencia del mismo fenómeno siendo él el que generó el fenómeno más grande de la historia del Brasil a raíz del fenómeno que estoy explicando, sin duda esto entra dentro del terreno de la fenomenología. Gracias al fenómeno Trump, las máscaras de la prensa comenzaron a caer una tras otra para que podamos ver sus horribles rostros de monstruos como el del depredador de la película, y gracias al fenómeno Bolsonaro ahora ya quedó completamente desnuda para ver su horrendo cuerpo lleno de inmundicia e injusticia y sentir su olor repugnante. Esto es fabuloso, sucede en nuestras narices, somos testigos privilegiados de un suceso de proporciones bíblicas, incluso apocalíptico, he aquí un versículo para contribuir con el último libro de la Biblia: «Y luego de caer sus máscaras y ver sus horribles rostros monstruosos, también cayeron sus vestidos y se vió su horrenda desnudez llena de inmundicia e injusticia y pudo sentirse a la vez su fétido hedor de esta gran ramera mentirosa llamada «la prensa». El mejor pueblo del mundo salió a las calles, las invadió como si fuera un mar, de hecho, lo és en el lenguaje bíblico-apocalíptico, y salió a clamar por justicia porque tiene mucha sed de ella. ...[Leer más]