A los 11 años degolló a su compañera porque le dijo “gorda”: la pequeña asesina con el coeficiente intelectual de un genio

Natsumi Tsuji era una niña dulce, con excelentes notas en el colegio y una alto IQ. Natsumi la guiaría. Sentó a Satomi en una silla, le quitó los anteojos y los apoyó con cuidado en un banco vecino. Le dijo que iba a morir. A pesar de eso, Satomi no salió corriendo. Natsumi le explicó que no debía mirar y le preguntó si le gustaría tener una toalla sobre sus ojos. Natsumi continuó dando rienda suelta a su rabia y le cortó las dos muñecas. Natsumi fue, detrás de él, llorando y repitiendo: “He hecho algo malo”. Un día, al ver la película japonesa Battle Royale, quedó impactada: el filme trataba sobre una sociedad futurista en la que unos 42 estudiantes eran enviados a una isla desierta donde debían sobrevivir matándose entre sí. El mundo gore, término que en inglés significa sangre y que se usa para denominar a un género cinematográfico donde las películas son de violencia explícita extrema, obsesionó a Natsumi. Un día, tuvo una discusión con Satomi Mitarai, su compañera de clase y mejor amiga. Satomi le dijo que ella era mucho más popular y, luego, publicó en el sitio de Natsumi un mensaje donde la llamó “gorda” y “pretenciosa”. Natsumi se enojó mucho y le exigió que se disculpara. Natsumi, que había retomado el básquet, volvió a abandonarlo. En esa foto, Natsumi está parada a un par de metros de Satomi, mientras las dos forman la “V” de la Victoria con sus dedos. Cuando los detectives de homicidios le preguntaron los motivos por los que había matado a su amiga reveló que se habían peleado por unos mensajes que Satomi le había escrito en Internet. El padre de Satomi, Kyoji Mitarai, de 46 años, aceptó el certificado en nombre de su hija menor. De todas formas, el fenómeno fue imparable. Una legión de fans de Natsumi empezó a poblar los foros japoneses y se expandió por todo el planeta. Sus seguidores se dedicaron a rendirle homenaje con dibujos, muñecos, juegos de video, animaciones, memes, canciones, poemas e historietas. Los cosplay emulando su imagen se pusieron de moda. Algunos fanáticos buscaron información sobre ella y llegaron a descubrir donde había vivido. Natsumi se había convertido en un ícono macabro para adolescentes, y algunos adultos, perturbados. Debate social y ventas El negocio online de la Universidad de Nevada, en los Estados Unidos, que vendía el buzo gris con la inscripción que había usado Natsumi el día que mató a su amiga, reconoció que dicha prenda había sido el ítem más vendido en los meses posteriores al homicidio. Esto había sucedido luego de un horrendo crimen en la ciudad de Kobe, en 1997, donde el asesino resultó ser un menor de 14 años. ...[Leer más]