Los fetos sonríen con el sabor de la zanahoria, pero hacen muecas con la col rizada, según sugiere un estudio - El Trueno

El investigador añadió que el estudio sugiere que «podríamos cambiar sus preferencias hacia esos alimentos incluso antes de que nazcan”, manipulando la dieta de la madre durante el embarazo. Y nuestras pruebas pueden ser útiles para entender que el ajuste de la dieta materna puede promover hábitos alimentarios saludables para los niños», añadió. «A medida que la tecnología avanza, las ecografías son cada vez mejores y más precisas», declaró a CNN, y añadió que esto «nos permite codificar los movimientos faciales del feto fotograma a fotograma con todo detalle y a lo largo del tiempo». Ustun añadió que «las diferencias genéticas en cuanto a la sensibilidad al gusto (tener una alta sensibilidad al sabor o no) podrían tener un efecto en las reacciones del feto a los sabores amargos y no amargos». ...[Leer más]