El último concierto de Madama Lynch

En los meses finales de la cruel Guerra contra la Triple Alianza, se arrastraron por esos campos los restos mutilados de una patria. Entre las preciosas cargas, estaba el piano de Madama Lynch. Entre ellas está vuestro piano. Pero lo que ella jamás iba a querer es ver a su querido piano luciendo como un trofeo de guerra en algún salón de los palacios de Río de Janeiro o Buenos Aires. Un soldado comunicó al oficial que el piano ya había sido llevado al sitio donde sería enterrado. Elisa alzó la vista al cielo y luego pasó ésta a los verdes campos y por último detuvo su mirada hacia el piano. las fiestas en que sentada al piano encantaba a todos los que la oían... Lentamente, ella fue acercándose al piano. El Mariscal hizo una señal para que los soldados bajaran el piano a la fosa. En ese día, 28 de enero de 1870, no era simplemente un piano el que era enterrado. Dicen los pobladores que trae consigo el recuerdo de aquel día en que la bella irlandesa tuvo que dejar el instrumento que tanto amaba, enterrado en esos campos. ...[Leer más]