“La cárcel es un cementerio de los vivos”, dice reo arrepentido

DESDE HACE 6 AÑOS CUMPLE EN EMBOSCADA UNA CONDENA POR ROBO. Asegura que quiere redimirse ante la sociedad y ayudar a los demás. Ilarión Ovelar (31) va por la mitad de una condena de 12 años, por robo, en la Penitenciaría de Emboscada. Hace 5 meses ingresó a “La Granja”, sector en el que solo se encuentran reos que califican por buen comportamiento. Sin embargo, antes de ser trasladado, el joven tuvo que enfrentarse a los momentos más terribles de su vida, en medio de una lucha por sobrevivir, en la oscuridad de su celda. “La cárcel es un cementerio de los vivos. No sabés si vas a amanecer", expresó el muchacho quien, además, admitió que en una oportunidad denunció maltratos físicos por parte de los guardiacárceles. Aprendió el oficio de electricista y trabaja en el penal para ganar algo de dinero. La añoranza es uno de sus principales enemigos. “Hay que estar adentro para saber lo que es extrañar. Cuando falleció mi abuelo, fue lo peor, no pude ir”, expresó, aún muy afectado por la ...[Leer más]