Infierno y desesperanza en Coatzacoalcos

El martes pasado un comando armado incendió El Caballo Blanco, el bar donde trabajaba. Nunca antes un ataque había conmocionado tanto a Coatzacoalcos, una de las ciudades más peligrosas del Estado de Veracruz y de México. "Coatzacoalcos se está volviendo un pueblo fantasma por la inseguridad", afirma, mientras espera en la Fiscalía a que le entreguen el cuerpo de su mujer. El funeral de Nayeli Irineo Gómez, en Coatzacoalcos. MÓNICA GONZÁLEZ Otra línea de investigación sugiere que el blanco del ataque fue Agustín Ronzón, señalado por el portal Pie de Página y otros medios locales como dueño del bar. Después de decir sus nombres y que eran de Coatzacoalcos, un hombre les pregunta por qué los detuvieron y ellos contestan que por chapulines, que en la jerga del narco se refiere a quienes traicionan a un cartel y se pasan a otro. El bar Mangos fue incendiado el pasado 22 de julio. La masacre de Coatzacoalcos abre también la herida de Minatitlán, un municipio aledaño en el que fueron asesinadas 14 personas en una fiesta en abril pasado. Entre enero y julio de 2015 hubo 13 homicidios dolosos en Coatzacoalcos, según datos oficiales. Hasta el mes pasado, el Estado de Veracruz acumuló 835 homicidios dolosos y en medio de la barbarie, más del 85% de los casos quedan impunes, según la organización Impunidad Cero. "Solo queremos que se sepa la verdad y que se haga justicia", dice Gómez, antes de volver al funeral de su sobrina. ...[Leer más]