El ubicuo racismo nuestro de cada día - Cultural - ABC Color

Veinte siglos pretéritos, Jesús decretó la igualdad de todos en una simple parábola. Fue la primera proclamación de la igualdad humana universal. Lo más difícil de todo fue la igualdad y sigue siendo cuenta política pendiente en todos los sistemas políticos. Otra revolución marxista-leninista, en Cuba, dotó de igualdad a los negros cubanos, pero los «gusanos» capitalistas no estaban incluidos, ni los homosexuales a muchos de los cuales Fidel trató de «curar» con lobotomías frontales. Los colonos firmaban un contrato donde se comprometían a abstenerse de bebidas alcohólicas, respetar la igualdad de las mujeres y evitar mezclarse racialmente con la población local. La gran crítica a Francia fue que «era mulato» y el libro de Ildefonso Bermejo describe una boda entre miembros de la burguesía, frustrada en el atrio porque se descubrió que la familia del novio tenía ascendencia negra. ...[Leer más]